González Ortega, sin jota de más
Este año, la invitación gubernamental -postal en redes-, para la ceremonia de evocación por el aniversario luctuoso del general de división Jesús González Ortega no trajo una jota de más. Hace años alguien le agregó una jota, y se volvió casi tradición escribir y publicitar: J. Jesús González Ortega.
Por algún tiempo insistí, como historiador y ciudadano contribuyente: la jota agregada era de más. Obvio, no se hacía caso y creo existía intención de rebautizar con la jota al zacatecano nacido en la hacienda de San Mateo, en la región que hoy día es municipio de Valparaíso.
Quién sabe de dónde sacarían la letra. Porque en vida pública y privada no hubo jota de más. Refiero, con base en unas pesquisas sobre la clase política: Jesús González fue el nombre que ostentó por 30 años, hasta que fomentó contacto con la parentela Mateos de Ortega residente en Jerez. Los primos y un tío le escribían a Jesús González Ortega, Jesús G. Ortega y Jesús González de Ortega. Ellos suscribían como Ortega y Mateos de Ortega.
En la fase pública también su nombre tuvo mudanzas. Inició como Jesús G. Ortega y lo amplió a Jesús González Ortega. Sus contemporáneos le denominaron González Ortega u Ortega, dependiendo del emisor; otros lo llamaron tocayo, amigo, hermano y compadre. El presidente Benito Juárez, en el extremo del enfrentamiento por la sucesión presidencial, le llegó a citar como “Chucho”.
El citado, nacido antes del registro civil, el supletorio en información fue la fe de bautizo, donde estuvo asentado como “José Canuto de Jesús” (José es el nombre impuesto a todos los niños –casi todas las niñas eran María-; Canuto es el santo del 19 de enero; Jesús es el nombre elegido para la trayectoria). Estos datos son proporcionados por el hijo Lauro y el nieto José González Ortega, quien lo refiere en el libro El Golpe de Estado de Benito Juárez. Rasgos biográficos del general Jesús González Ortega, liminar de Vito Alessio Robles, Ciudad de México, Impresor Alberto del Bosque, 1941 (Ed. Facsimilar, “Apuntes sobre el libro”, Héctor Pedro González Ortega y Zalce, Marco Antonio Flores Zavala, Ciudad de México, Instituto Zacatecano de Cultura, Gran Logia del Estado de Zacatecas Jesús González Ortega, 2013).
La jota añadida fue un invento que indicaba prepotente ignorancia ante la biografía y el estilo de González Ortega. Expresé en público, en redes, todavía hace un año: deseo, como contribuyente, que las autoridades vinculadas no sean responsables de tal error, sino que provenga de una sombra ignorante -nunca faltan-.
No imagino a la Crónica generando tal error garrafal, eso mancharía el prestigio del titular. El Instituto Zacatecano de Cultura ha fomentado publicaciones sobre el citado político. Incluso la Biblioteca Pública sabe de tal cuestión, pues en su acervo contiene parte de la biblioteca que fomentó a quien mencionamos. Como contribuyente: el fomento y permanencia de la ignorancia significa derroche de mi contribución ciudadana.
Otro dato que no deseo pasar por alto: Wikipedia señala la fecha de nacimiento como día “20 de enero”. Quién sabe de dónde tomó la fecha. Considerando la fe de bautizo, el día es el 19 de enero. No dice la hora, sí los padrinos y los padres. En 1898, también se especuló con otros datos: fecha “8 de octubre de 1824”, registrado como “José Brixido de Jesús y como padrinos el B. D. Guerrero y Da. Faustino Valera”.
En fin, el inicio siempre provoca a la especulación y a la construcción del mito.
Posdata:
Vivimos un año bisiesto. Ayer hicimos el día de más. Esto es asunto de tiempo, suma y ajuste de horas, no de astrología y predicciones.