ZACATECAS. Por la insuficiencia probatoria del Ministerio Público (MP), el órgano colegiado deliberó fallo absolutorio a María “N”, en el caso del feminicidio de Aurora, una menor de un año y medio, ocurrido en Guadalupe a finales de 2022.
La acusada fue denunciada como coautora del delito realizado por su ex pareja, Julián “N”, quien fue sentenciado a 35 años de prisión por medio de un juicio abreviado en diciembre de 2023.
Este martes, luego de una deliberación en privado y de la audiencia de alegatos finales, los jueces expusieron que María “N” sufría violencia por parte de su ex pareja.
Además, aceptaron las pruebas expuestas por la defensa, en las que destacaron que el día en que murió la menor, la señalada no estaba presente en el lugar, por lo que no se le pudo imputar ningún cargo en su contra.
Los jueces aseveraron que al no estar presente en el cuidado de Aurora, por el trabajo que tenía que desempeñar, tampoco pudo evitar las lesiones que sufrió la menor en manos de Julián “N”, quien era quien la supervisaba.
Por lo anterior, no encontraron fundamentos en la acusación en contra de María “N” por no informarle de los hechos a su hija. Además, de no ser juzgada como cómplice, ante el antecedente de violencia existente.
DESCUIDO DE LAS AUTORIDADES
Los jueces detallaron que desde que acudió María “N” con su hija al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) por una fractura en el brazo, en noviembre de 2022, el personal denunció, por protocolo, maltrato infantil.
Pese a lo anterior, el MP no dio seguimiento al caso, por lo que señalaron hubo omisión por parte de las autoridades, quienes pudieron haber detectado que María “N” vivía en medio de un entorno de violencia que no fue atendido oportunamente.
Además, destacaron que el MP integró los cargos de privación forzada de la libertad durante el transcurso del juicio, pero no aportaron bases suficientes lógicas que pudieran acreditar los hechos, pues se basaron únicamente en testimonios de familiares. “No hubo hechos que constituyeran el delito”, indicaron.
MUJERES LIBERADAS
Con la liberación de María “N”, en los últimos dos años son tres casos en los que los padrastros han asesinado hijos menores de edad de sus parejas y las mujeres fueron liberadas por demostrar ser víctimas de violencia.
El primero de ellos ocurrió el 18 de mayo de 2022 en Valparaíso, donde una menor ocho meses fue abusada y asesinada, y aunque en ese entonces las autoridades detuvieron a Hortensia “N”, madre de la menor, su ex pareja, Julio “N”, fue el único sentenciado con 50 años de prisión.
Lo anterior, ya que el entonces presidente magistrado del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Zacatecas, Arturo Nahle García, precisó que gracias a un testimonio colaborativo en el caso, Hortensia logró su libertad, ya que se demostró que no participó en los hechos y que era violentada por su expareja a quien le tenía temor.
Otro caso que también conmocionó a los grupos feministas y defensoras de los derechos de los niños fue el de la menor Milagros, quien muriera en el Hospital General de Fresnillo (HGF), luego de ser víctima de violación y maltraro físico por parte de su mamá y su padrastro.
En ese caso también las autoridades detuvieron a la pareja y a la madre de la menor, José y Flor “N”, y fueron vinculados a proceso.