TLALTENANGO DE SÁNCHEZ ROMÁN. El candidato a presidente municipal de Tlaltenango de Sánchez Román por los partidos Revolucionario Institucional (PRI), Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD), Salvador Arellano Anaya, aclaró presuntas irregularidades que aspirantes de la oposición han señalado sobre su administración.
Aseguró que no ha tenido incremento a su salario como alcalde, salvo un monto de 4 por ciento anual, como se hizo con el resto de los funcionarios.
Con respecto a las críticas porque tiene familiares en la nómina, expuso que son tres los parientes directos: Miguel y José Arellano Rodríguez, cuya relación laboral con el gobierno local inició en octubre de 2010, y Rafael Arellano, contratado en junio de 2014, es decir, en trienios pasados.
El ayuntamiento, agregó el abanderado de Fuerza y Corazón por Zacatecas, solo cuenta con un crédito ante el Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras), el cual se contrató en octubre de 2018 y está por concluir el pago de estos recursos, que se destinaron al cambio de luminarias.
En cuanto a la adquisición de un predio para la construcción de un relleno sanitario, recordó que fue el principal problema recibido en su administración y que el gobierno del estado lo solicitaba para iniciar la obra, por lo que se pagaron 1 millón 150 mil pesos, y no 6 millones, por 21 hectáreas.
Arellano Anaya también desmintió que por el convenio con Colotlán, Jalisco, para la disposición de residuos, se pague 160 mil pesos, pues precisó que el Cabildo autorizó que se destinarán 10 mil mensuales con este objetivo.
Al tratar el tema de seguridad, informó que recibió el Municipio con 28 elementos y actualmente ya son 48, además de que cuentan con mejores condiciones laborales, con un aumento salarial y homologación a 12 mil pesos mensuales si cumplen con exámenes de control de confianza.
“¿La verdadera pregunta es si los tlaltenanguenses podemos vivir como están viviendo en Jerez de García Salinas, Fresnillo, Zacatecas o Guadalupe? Pensemos en la tranquilidad y la paz de Tlaltenango, de nuestros hijos y nuestras familias”, cuestionó quien busca la reelección.