CIUDAD DE MÉXICO. Las reformas a leyes secundarias del sector eléctrico anunciadas ayer por el Gobierno federal abren la puerta para que el sector privado participe en la generación de electricidad, ya sea de manera directa o a través de esquemas de participación mixta.
Al presentar los principales cambios para el sector eléctrico previstos en leyes secundarias, Luz Elena González, titular de Energía, aseguró que la iniciativa privada tendrá cabida de manera «ordenada y transparente», mediante seis esquemas que se dividen en consumo propio, pequeña escala y generación de energía.
Para el primer caso, están la generación distribuida residencial y comercial, cuya capacidad se incrementa de 0.5 a 0.7 megawatts sin necesidad de permiso, así como el autoconsumo aislado, que permitirá instalar plantas con capacidad que irá de 0.7 y 20 megawatts, con un permiso expedito y sencillo.
En cuanto a las tres figuras de generación de gran escala se establecen contratos de producción de largo plazo con entregas de energía a la CFE, con la posibilidad de que al término los activos pasen a la empresa pública, tal y como sucede actualmente con los Productores Independientes de Energía.
En todos los casos de esquemas mixtos, la CFE tendrá, por lo menos, el 54 por ciento y la IP el 46 por ciento restante, compartiendo riesgos y beneficios, aseguró González.
La funcionaria expuso que se mantiene la figura de generador para venta en el mercado eléctrico mayorista, que no desaparece.
En este caso, se planteó que el mercado eléctrico operará con un criterio de despacho económico -ordenar la generación de las centrales de la más barata a la más cara- con confiabilidad en la red. Del operador, es decir, el Centro Nacional de Control de Energía, no se detalló nada.
Rosanety Barrios, experta en el sector energético, consideró positivos los primeros tres esquemas de participación privada de menor escala, e incluso la posibilidad de vender excedentes a la CFE, lo cual anteriormente no podía hacerse.
Otro elemento positivo está en la posibilidad de simplificar trámites, considerando que en el sexenio pasado los permisos de generación privados fueron frenados.
Sin embargo, destacó que quedan dudas sobre la participación privada en los proyectos de mayor alcance, sobre todo para calcular el 54 por ciento de participación mayoritaria de la CFE.
«Hay una duda muy grande, que es la manera en la que se calculará la prevalencia del 54 por ciento de la energía inyectada a la red por parte de la CFE, pero al mismo tiempo dicen que se mantiene el despacho económico (de la energía), y no nos han aclarado cómo es que convivirán ambas premisas», puntualizó.