TEPECHITLÁN. Luego de que denunciara un atentado en su contra, el alcalde Adolfo Cortez Santillán reprochó que el titular de la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGJE), Cristian Paul Camacho Osnaya, minimizara los hechos, pues “mi seguridad fue dejada a la deriva al no otorgarme una escolta”.
Recordó que cuando fue a reiterar su denuncia a la dependencia preguntó si era candidato para que le proporcionaran custodia policiaca. “Solo me dijeron que iban a checar, que quizá la Guardia Nacional (GN), pero al último ni uno ni otro”.
Es así que refirió que la fiscalía subestimó su denuncia. Por ello tomó medidas por su cuenta y se hizo acompañar por policías municipales, aunque aseveró que los uniformados ya no lo escoltan, ya que las intimidaciones cesaron.
Cortez Santillán sostuvo: “entiendo que quieran dar carpetazo a mi asunto por indicaciones del gobernador [David Monreal Ávila], porque a él no le conviene que haya un tipo de atentado contra un presidente [municipal], pues va en contra de su eje [su discurso] de seguridad [sobre] que Zacatecas está dentro de los estados más seguros”.
Con ello apuntó que su caso “le quitaría credibilidad a lo que él dice. Por ello las declaraciones del fiscal, quien sostuvo que mi vida nunca estuvo en riesgo”.
Sin embargo, el alcalde dijo estar confiado en que “se le dé movimiento a la carpeta de investigación” tras encontrar la camioneta en la que viajaban los sujetos que lo intimidaron, además de los testigos y videos que hubo del hecho.
HALLAN VEHÍCULO DE RESPONSABLES
El presidente municipal de Tepechitlán informó que el 7 de mayo localizaron en la comunidad Talesteipa la camioneta de los sujetos que lo amenazaron. La unidad era conducida por un joven, quien aseveró que acababa de comprar el vehículo, sin saber que tenía reporte de robo.
Detalló que el chofer estuvo tres días en prisión y luego un juez lo dejó en libertad, al comprobar que adquirió la unidad sin saber que estaba vinculada a un hecho delictivo. Además, la camioneta fue reclamada por su dueña, quien informó que se la quitaron con violencia a finales de marzo.
Por otra parte, en referencia a la crisis interna que vive el Cabildo, Adolfo Cortez indicó que todo sigue igual, pues enfatizó que “sigo trabajando con las manos amarradas, pero aún así, no me rajo, estoy al pie del cañón echándole ganas”.