FRESNILLO. Estudiantes de la Universidad Politécnica de Zacatecas (UPZ) liberaron las instalaciones este martes, luego de llegar a varios acuerdos con la rectora Juliana Arteaga Carrillo en lo concerniente a problemáticas académicas y administrativas.
La directora explicó que su administración asumió con responsabilidad la situación y entabló una reunión de trabajo con los manifestantes, una opción que sin embargo no fue tomada en cuenta por el alumnado antes de cerrar el plantel este lunes.
“Yo les dije que me hubiera gustado que me buscaran antes. Habríamos aclarado muchas cosas sin necesidad de cerrar la universidad. Aun así, se resolvió la mayor parte de sus inquietudes, y lo que no se puede resolver de inmediato, se irá trabajando durante el cuatrimestre y el año”, afirmó.
Al respecto, precisó que uno de los acuerdos más relevantes fue el compromiso de dar seguimiento puntual a las quejas de los estudiantes en cuanto al desempeño docente. Para ello, se establecerá un procedimiento claro para recibir y canalizar denuncias o inconformidades, especialmente en casos de presunto acoso o maltrato.
“Es muy importante que los alumnos sepan a dónde acudir, sin miedo a represalias, porque muchos nos dijeron que prefieren no quejarse por temor a afectar sus calificaciones. Queremos asegurarles un ambiente de respeto y acompañamiento”, puntualizó.
En cuanto al cobro adicional de cien pesos en el proceso de reinscripción, Arteaga Carrillo explicó que dicho aumento fue aprobado por la junta directiva y publicado en el Diario Oficial, por lo que aseguró que es completamente legal.
Sin embargo, detalló que, debido a un desfase en el sistema de finanzas, algunos alumnos no encontraron el nuevo monto en sus líneas de captura bancarias y tuvieron que complementar el pago directamente en la universidad.
“No se trata de un pago externo ni irregular. Todo está auditado, reportado a la Secretaría de Finanzas (Sefin) y respaldado por la normatividad institucional”, aclaró.
ACUERDOS Y PENDIENTES
Respecto a la asignación de profesores al inicio de cada cuatrimestre, la rectora de la UPZ reconoció que es un tema complejo. “Tenemos ocho carreras y alrededor de 90 docentes. Hacer que todo corra con fluidez es un reto.
“La carga se asigna conforme al contrato colectivo, con base en la antigüedad y el perfil académico. En ocasiones excepcionales se asignan materias generales a docentes con perfil afín”, explicó.
En lo referente a la materia de Inglés, detalló que los estudiantes le denunciaron pagos extraordinarios, como el cobro de libros con costos superiores a 700 pesos, los cuales en algunos casos no fueron utilizados por los docentes.
En este sentido, indicó que se realizará una revisión interna a la Academia de Inglés para verificar que los materiales solicitados sean debidamente aplicados y justificados.
Otro de los temas tratados, destacó, fue el de las condiciones de la infraestructura universitaria, como los baños y laboratorios, en los cuales hay un rezago importante debido a la antigüedad de las instalaciones y las limitaciones presupuestales.
“La universidad tiene 22 años. Cuando llegamos encontramos problemas financieros graves. Hemos avanzado, ya solo nos quedan pendientes menores en laudos y créditos fiscales, pero seguimos operando con disciplina y austeridad”, afirmó.