Zacatecas.- Una discapacidad visual no es un impedimento para acercarse a la lectura, cada vez más personas aprenden a utilizar el sistema Braille.
Desde hace más de 20 años, Alfonso Muñoz Piedra, responsable de la Sala de Invidentes de la biblioteca Mauricio Magdaleno, en la capital zacatecana, alfabetiza a personas con alguna discapacidad y a los interesados en aprender dicho sistema.
En esta sala especial, mensualmente se atiende entre 40 y 50 usuarios que buscan su desarrollo personal.
“Vienen personas que no saben leer ni escribir y aquí les enseñamos, han pasado muchas personas por aquí, algunos ahora son profesionistas”, expresó.
Con una colección cercana a los 900 libros, tanto escolares de nivel primaria, secundaria y preparatoria, así como literatura y consulta general; en este espacio se busca dar a conocer a los usuarios, obras escritas en sistema Braille, en especial a aquellos con deficiencias visuales, esto como una estrategia para promover la integración social de las personas con alguna deficiencia visual.
Alfonso Muñoz da muestra de que las ganas de aprender y la imaginación no tienen límites, él sostiene que todo es posible: aprender a leer, escribir y conocer obras de escritores como el mexicano Juan Rulfo, o 100 Años de Soledad, del colombiano Gabriel García Márquez.
“Tenemos (obras) de Octavio Paz, El Laberinto de la Soledad, de Martín Luis Guzmán, La Tormenta, tenemos La Sombra del Caudillo”, apuntó.
Fue en 1986 cuando al inaugurarse la biblioteca Mauricio Magdaleno, se habilitó la Sala de Invidentes junto con otros espacios. El responsable refirió que esta sala especial con que cuenta la principal biblioteca del estado, fue pionera a nivel nacional en el impulso del este tipo de áreas, pues después de su apertura se crearon otras similares en Durango, Tamaulipas y el Distrito Federal, entre otras.