Guadalajara. A unos mil 500 comerciantes que operaban sin permiso en el tianguis de El Baratillo se les impidió instalarse por parte del personal del Ayuntamiento de Guadalajara, en Jalisco, lo que generó inconformidades y fricciones.
Pese a que el operativo buscaba regularizar el funcionamiento del tianguis, se dejó para otra ocasión la revisión a giros no permitidos, como la venta de animales vivos.
“Ahorita lo que hicimos fue no dejarlos instalarse para efecto de evitar algún conflicto (…), lo de los animales (que venden vivos) será en otra etapa”, dijo Juan José Larios, jefe de Inspección a Mercados y Comercios en Espacios Abiertos.
Explicó que entre las quejas que han recibido destaca la venta de objetos supuestamente robados.
Sin embargo, Salvador Orozco, director de Inspección y Vigilancia, informó que no habían realizado decomisos de mercancía.
“Este relajo lo empezaron ellos mismos, los coordinadores del ayuntamiento cobraban 100 pesos, 200 pesos por dejarte poner y luego se vino la campaña con la promesa de que ‘trabájale y vota por nosotros’”, acusó Rosalío Morales, líder del Frente Único Nacional de Comerciantes Tiangueros Organizados.
El operativo se centró en 20 manzanas de las calles 40, 42 y Pablo Valdez; se acordó que serán atendidos en las oficinas de Inspección a Mercados y Comercio en Espacios Abiertos.
Por separado, el alcalde tapatío, Ramiro Hernández, ofreció que la regularización continuará.