Fresnillo.- Cerca de 500 campesinos fresnillenses desvararon el tomatillo que sembraron, es decir, lo sacaron de los surcos y lo tiran a un lado de las milpas, debido a que bajó de precio más de 75 por ciento en días recientes, por tal motivo se enfocarán a cultivar otros productos.
Manuel Alvarado Bugarín, quien se dedica a la compra y venta de esta verdura, describió que se ha dado cuenta de esta situación al mantener contacto con los agricultores en las distintas localidades.
Además especificó que los campesinos le venden el kilo de tomatillo a 1.30 pesos, pero de ese precio se le paga 1 peso a quienes lo cortan de los surcos y únicamente les quedan 30 centavos, “no sacamos ni para el hule y la cintilla, mucho menos los costos de inversión”, aseveró.
El intermediario refirió que este producto lo vende por mayoreo a 2 pesos y por menudeo a 3; sin embargo, enfatizó que la situación es complicada para ellos debido a que las ventas son mínimas.
“Es el peor año del tomatillo en El Mineral; estamos desilusionados, primero porque se perdió demasiado con la tormenta que cayó el 16 de junio acompañada de granizo, posteriormente por su bajo costo y porque los campesinos optan por desecharlo”, recalcó.
Comentó que Salomón Ramos, de Tapias de Santacruz, es uno de los productores más importantes de esta verdura, pero en este año desvaró 30 hectáreas.
En Fresnillo más de 15 personas se dedican a ser corredores de tomatillo, es decir que compran y venden.
Lo que afectó para que el producto esté barato fue que las cosechas en León, Guanajuato, Aguascalientes y Zacatecas fueron al mismo tiempo.
“Me piden tomatillo de San Luis Potosí pero me lo pagan a 1.40 pesos, sería como regalárselos, por eso mejor los productores lo desperdician”, recalcó.
Las comunidades de esta demarcación donde se da más esta verdura son Río Florido, Emancipación y Altamira.
Por su parte, el bodeguero Enrique Carrera Sandarte argumentó que el bajo precio de este producto no le ha perjudicado, ya que las pérdidas han sido para los campesinos, “ellos sí atraviesan por una situación lamentable”, enfatizó.
Comentó que hace un mes vendía el kilo de tomatillo a 25 pesos y ahora comercializa hasta tres por 10 pesos.
En tanto, Antonio Pérez Escareño, comerciante del Mercado de Abastos, informó que la ley de la oferta y la demanda es lo que ha afectado para que el precio del ajo haya bajado considerablemente.
Declaró que la solución para este “difícil” panorama que enfrentan tanto los productores como los vendedores es que se exporte el producto, ya que en la actualidad hay demasiado de Guanajuato y Zacatecas, pues apenas se comercializó el que se importó en diciembre de 2012 de Argentina.
Pérez Escareño manifestó que les queda más ganancia a los dueños de las tiendas, debido a que venden el kilo de ajo hasta 35 pesos, cuando él lo adquiere con los campesinos a 8 pesos pero con merma, que al quitarle lo malo le saldría a 13 pesos y él lo vende a 18 pesos.
Este producto lo adquiere en Calera, Villa de Cos y Fresnillo, además aclaró que únicamente aguanta en buenas condiciones seis meses y a partir de ese lapso comienza a echarse a perder.
También comentó que cerca de 25 personas en El Mineral se dedican a ser compradores y vendedores de ajo y cada uno de ellos generan más de 50 empleos, pero por las ventas que tienen muy apenas sacan para pagarles y no les quedan ganancias suficientes.