Trancoso. Previo al desfile que se llevará a cabo este 20 de noviembre, habitantes de Trancoso comentaron que cada año, en lugar de ser un acto cívico, las principales calles de Trancoso se convierten en un basurero.
Dijeron que este año las arterias están muy afectadas a causa de las lluvias que se han registraron a partir de junio, y que, por su parte, las autoridades nada han hecho para remediar esta situación, “ni si quiera en el acceso principal”, acotaron.
Cada año, al concluir el desfile del 20 de noviembre, en conmemoración de la Revolución Mexicana, se lleva a cabo la verbena popular.
Lo malo de ello, expresaron los habitantes de Trancoso, es que no se colocan depósitos de basura, por lo que el municipio se convierte en un tiradero, lo que causa molestia a quienes viven por donde pasa el contingente.
Por si fuera poco, tampoco hay control en cuanto a la circulación vehicular; “es común ver vehículos estacionados en doble fila, mientras algunas personas tienen que esperar horas para que les dejen el paso libre y poder sacar sus camionetas”, añadieron.
Ante ello, confiaron en que este miércoles no suceda así, y que la nueva administración ponga orden en este sentido, y que también incrementen la vigilancia, “porque son días en que hasta las escuelas, ante el descuido de los elementos de Seguridad Pública, sirven como sanitarios, sobre todo en la tarde, cuando los hombres se emborrachan y buscan cualquier espacio para realizar sus necesidades fisiológicas”, expresaron.