Zacatecas. Ha iniciado un nuevo año y con él, una vez más, las intenciones de cumplir la lista de propósitos que cada 31 de diciembre la gente se compromete a la par de cada una de las 12 campanadas.
Desde el primer día del 2015, muchas personas comenzaron a poner en práctica las actividades necesarias para alcanzar sus objetivos para este año, ente ellos bajar de peso, el más común.
Sin embargo, el camino al infierno está empedrado de buenas intenciones y no sólo basta con tener la intención, sino una real decisión de llevarlos a cabo y, sobre todo, fuerza de voluntad para concretarlos.
En un sondeo, los entrevistados dijeron que abrir una cuenta de ahorros, levantarse más temprano, hacer ejercicio o ir al gimnasio, así como leer más, dejar el alcohol o el tabaco, comprar un auto o una casa, dedicarle más tiempo a la familia, no contraer más deudas o pagar las que ya se tienen, son de los propósitos más comunes.
Pero a esos objetivos no suele ponerse fecha de cumplimiento, hecho que marca la pauta para abandonarlos de manera inconsciente, pues se tienen 12 meses para alcanzar dichas metas, por lo que son postergadas y finalmente, otra vez se tiene el año nuevo encima.
En realidad los propósitos de año nuevo no son tan complicados de cumplir y mucho menos inalcanzables o imposibles; el desinterés y la falta de tiempo, sobre todo, son los factores que orillan a la mayoría de las personas a claudicar.
Pero, ¿qué se puede hacer para cumplirlos?
La primera recomendación es establecer propósitos que se apeguen a la vida y hábitos personales, sin hacer caso a los del resto de la gente ni a las tendencias de las redes sociales. Basta con definir las prioridades, lo que se necesita cambiar en la vida y definir paso a paso una propuesta para cumplir los objetivos planteados.
Segundo, hay que mantenerlos. Conforme pasa el tiempo cambian las circunstancias, por lo que se puede llegar a pensar que el propósito establecido resulta ahora inútil. Sin embargo, ello sólo es pretexto para no continuar con el proceso, pues las nuevas actividades pueden integrarse a las que ya se realizan, todo es cuestión de adecuarlas.
Tercero, establecer un tiempo de cumplimiento y aceptar que en algún momento el entusiasmo va a decaer. Es necesario enfrentar los miedos al cambio y mantenerse firme en las decisiones para evitar claudicar.
Finalmente, hay que intentar cuantas veces sea necesario. Si en algún momento se siente que se ha perdido el objetivo, se debe volver a encausar y regresar a las actividades requeridas para alcanzarlo; no hay que esperar hasta el lunes siguiente o a la próxima luna nueva, lo importante es no dejarse vencer.
Algunos propósitos de cada año
* Hacer ejercicio/bajar de peso
* Aumentar la productividad en mi trabajo
* Ahorrar dinero
* Colaborar en causas justas
* Comprar un carro
* Hacer algo bueno por alguien todos los días
* Encontrar pareja
* Comprar una casa
* Dejar de tomar
* Tener un hijo
* Alejarse de las adicciones
* Comer más saludable
* Pagar las deudas
* Tomar más agua
* Tomar un curso
* Ser más cariñoso con mi pareja
* Vivir con menos estrés
* Dedicar más tiempo a la familia
* Viajar
* Ser más ecológico
* Visitar a amigos y familiares
* Limpiar la casa
* Aumentar la autoestima
* Decir más seguido “te quiero”