Zacatecas.- Con la finalidad de proteger a los menores que atraviesan por procesos de desintegración familiar, el Tribunal Superior de Justicia creó el Centro de Convivencia Familiar Supervisada del Poder Judicial del Estado de Zacatecas.
Alejandro Robles de la Torre, director general del Centro, informó que el objetivo de éste es que la convivencia entre el progenitor no custodio y el hijo se desarrollen en un ambiente agradable.
Detalló que el 21 de septiembre se iniciaron las actividades en el Centro, donde se llevan a cabo las convivencias supervisadas o las identificadas como de entrega-recepción, según la determinación del juez.
Destacó que la intención es generar entre padres e hijos lazos de afección y confianza, para que después se traslade a otras áreas, sin necesidad de supervisión.
Refirió que los casos por los que se dan las convivencias son en procesos de divorcios, parejas que no estuvieron casadas y procrearon un hijo, pero dada la separación se prevé el derecho del menor a convivir con la madre o el padre, según quien tenga la custodia de éste.
Robles de la Torre especificó que la mayoría de las convivencias se da con padres de familia, y sólo hay un caso en que la madre convive con sus hijos en el Centro; además, expuso que en lo que va de la apertura, semanalmente, se llevan a cabo cerca de 40 convivencias.
El Centro cuenta con dos salas amplias, donde conviven los padres y los hijos y pueden jugar, leer, brincar, bailar, platicar, dibujar y realizar actividades que les permita interactuar 100 por ciento sin distracciones.
Asimismo, el lugar cuenta con una cocina, pues los padres llevan comida para pasar un rato agradable con sus hijos.
Destacó que el uso del centro es completamente gratuito, pero los usuarios deben contar con el dictamen del juez, donde se indique que es necesaria una convivencia dentro del mismo.
El centro estará abierto los 365 días del año, de lunes a domingo y para llevar a cabo las convivencias hay ciertas reglas como que los padres no hablen mal el uno del otro, no tomar conductas ni gritar a los niños, no hablar acerca del juicio.
El director agregó que a los padres se les dan talleres psico-educativos para que sepan cómo comportarse entre sí y no afectar a sus hijos, quienes están al medio; para ello el personal que integra el centro consta de psicólogos, trabajadores sociales, un área médica y vigilantes.