Luego de la pésima cosecha de miel que tuvieron los apicultores de Fresnillo, al menos 30 por ciento perdieron sus colmenas y han abandonado esta labor, debido a que ya no genera ingresos para ellos y es muy costoso mantener las colmenas.
Gustavo de la Paz Quiroz, apicultor de la demarcación y empresario, recordó que este año la producción de miel de primavera no fue favorable, perdiendo hasta 90 por ciento de la cosecha debido a la sequía.
De momento, los apicultores están preparándose para la temporada de otoño, que comienza en octubre.
En esa época los productores se dedican a alimentar y nutrir las colmenas para su fortalecimiento; a consecuencia de la sequía, los productores deben proveer a las abejas de alimento, ya que no hay flores de donde puedan conseguirlo ellas mismas.
Esto deriva en mayores costos para los apicultores, si bien están acostumbrados a alimentar a las abejas, en esta ocasión, el periodo se ha extendido por la sequía, incrementando así los precios hasta en 50 por ciento.
“Si la sequía continúa más tiempo se corre el riesgo de que no nazca la flor, este tipo de floración es de temporal, si llueve nos va bien y si no llueve a tiempo nos agarra el frío, empiezan a caer heladas y ya no hay producción tampoco de miel de aceitilla”, explicó.
Aunado a esto, pese a las importantes pérdidas para estos sectores, no recibieron apoyos gubernamentales como un seguro catastrófico, aunque de momento están tramitando apoyos para conseguir infraestructura y nutrición.
Por esta situación tan adversa algunos apicultores de la región han dejado esta labor y se han unido a otros trabajos, estiman que al menos 30 por ciento de apicultores lo han dejado ante las pérdidas que tuvieron durante la pasada cosecha de miel.