ZACATECAS. Con fotos de sus hijos y la boca cerrada con cinta, madres buscadoras se manifestaron durante el desfile del aniversario 213 del Día de la Independencia. Reclamaron la falta de atención de las autoridades, que fueron escoltadas al Palacio de Gobierno.
Desde las primeras horas de la mañana, familiares de personas desaparecidas se hicieron presentes para la marcha silenciosa, en busca de exponer su cansancio y desesperación por no tener respuesta o avances de las investigaciones para dar con el paradero de sus seres queridos.
“Estamos muertas en vida. Ni vivimos ni dejamos vivir a nuestra familia”, reprocharon. Quienes asistieron a ver el desfile se solidarizaron con las manifestantes y el silencio se apoderó de las calles del Centro Histórico hasta que de entre la multitud se escuchó: “estamos con ustedes”.
Voces de niños preguntaban “¿por qué llevan fotos y lloran?”, mientras que los adultos bajaban la mirada. Entre aplausos, se extendió la fila de fichas de búsqueda.
Agentes de Seguridad Vial se colocaron al frente del contingente, lo que indignó a las mujeres. “Estamos encapsuladas y silenciadas, porque ya no hay confianza en la autoridad. Todos los casos de desaparición los dejan en el olvido y no investigan a fondo”, criticaron.
Al llegar al templete, se plantaron frente al gobernador David Monreal; el secretario General de Gobierno, Rodrigo Reyes Mugüerza, y el de Seguridad Pública, Arturo Medina Mayoral; el magistrado presidente Arturo Nahle García; el comandante de la undécima Zona Militar, Alejandro Vargas González, y el coordinador de la Guardia Nacional (GN), Leonel Alcaraz Alarcón.
El grupo de mujeres, acompañadas por niños, mostraban las pancartas con fotografías. Nadie dijo una sola palabra hasta que, entre reclamos y gritos de protesta, las corporaciones de seguridad retiraron al mandatario estatal y demás autoridades para escoltarlas hasta el Palacio de Gobierno.
Una vez adentro, elementos de la GN y de la Policía Estatal Preventiva (PEP) se postraron frente a las puertas del edificio. Las buscadoras le reclamaron al secretario Rodrigo Reyes: “nos hicieron menos”.
“Tengo pruebas de quién lo desapareció y nunca hicieron nada, el méndigo anda libre. Ahí anda paseándose como si nada. ¿Por qué, porque uno es pobre? Todos estamos expuestos. No se vale que no nos hagan caso, nosotros también somos seres humanos”, recriminó una madre que desde hace nueve años busca a su hijo.
Mesa de trabajo
Horas más tarde, mediante un comunicado, el gobierno del estado informó que “el secretario general de Gobierno, Rodrigo Reyes Mugüerza, y el titular de la Comisión Local de Búsqueda de Personas en Zacatecas, Everardo Ramírez Aguayo, atendieron a familiares de personas desaparecidas”.
Se detalló que “se ha instalado una mesa de atención en la que participan la Fiscalía Especializada para la Atención de Desaparición Forzada de Personas y Desaparición cometida por Particulares de la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGJE), la Comisión de Búsqueda, colectivos y organismos del gobierno de Zacatecas, con el propósito de dar seguimiento a las acciones que se realizan para la localización de personas”.
Cerca de las 19 horas del sábado, Reyes Mugüerza informó que “el lunes se llevará a cabo la primera mesa de trabajo”.
“El objetivo es establecer un mecanismo de comunicación directo y constante para continuar atendiendo a quienes se encuentran en la búsqueda de un ser querido. Este gobierno siempre estará del lado de las víctimas”, aseguró en sus redes sociales.
Por otra parte, el colectivo Sangre de mi Sangre se pronunció: “Nos duele ver el silencio gubernamental ante el dolor profundo que implica esta tragedia. En el estado hay más de 3 mil 600 personas desaparecidas y/o no localizadas, según la Comisión Nacional de Búsqueda (CNB).
“Las autoridades se han comprometido varias veces a establecer mesas de trabajo constante, pero hasta el momento no ha sido así. No atienden reclamos y las respuestas siguen siendo las mismas de siempre: ineficientes tanto para la prevención como para la búsqueda. Ojalá con la rapidez que blindaron el Palacio de Gobierno atendieran los derechos violentados de las familias”.