ZACATECAS. Debajo de la lluvia y en medio de un Centro Histórico ataviado por los colores y elementos tradicionales para honrar y recordar a los difuntos, arrancó el Festival de Día de Muertos Zacatecas 2023.
Los trabajos que comenzaron en días previos apresuraron su marcha desde temprana hora de este lunes, para cubrir las principales calles de la capital con catrinas, alebrijes y calaveritas, así como con los colores típicos: morado, verde, rojo y el naranja.
El resultado de los esfuerzos coordinados estuvo listo para la noche cuando, al ritmo de la música en vivo, los asistentes recorrieron los diversos arcos adornados con calaveras y cempasúchil, al igual que otras laboriosas construcciones dispuestas en diferentes puntos del primer cuadro de la ciudad.
Pasaje al inframundo
En el Museo Zacatecano se abrió un portal al Mictlán, el inframundo prehispánico donde comienza la eternidad, y de cuyo interior emergió el olor del incienso que perfumó la noche.
“El inframundo se encuentra en los umbrales de la tierra, más allá del horizonte, en el fin del mundo donde reposan las almas”, narra una advertencia colocada en el arco que adorna al museo.
Además hay un mural de aserrín de colores, que se extiende a la calle Dr. Ignacio Hierro, para encaminar a los visitantes a presenciar la historia del Mictlán.
Mientras tanto, una calavera colosal ahora custodia la entrada a la Unidad Académica Preparatoria (UAP) Programa 1, de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ), y otra más le hace compañía al pintor Francisco Goitia en la plazuela que lleva su nombre.
El recorrido
A pesar de la fría noche, el público emprendió un recorrido por la avenida Hidalgo, donde fue testigo de tributos a personajes ilustres de la vida de Zacatecas.
Tal es el caso de las ofrendas colocadas en el Portal de Rosales, dedicadas a Antonio Borrego de la Torre, emprendedor zacatecano, y Salvador Jasso Pérez, luchador por los derechos LGBTIQ+.
El trayecto terminó en Plaza de Armas, con tamborazo, calaveras y diablitos, además de pan de muerto y chocolate para los asistentes que soportaron la lluvia que inauguró el festival.