ZACATECAS. Encontrar quién lo supliera y romper las barreras multiculturales fueron los principales retos del profesor Manuel de Jesús Arévalo Robles, quien participó en un intercambio educativo para impartir clases a niños migrantes en Estados Unidos.
A sus cinco años como docente rural multigrado tuvo la oportunidad en 2022 de participar en el Programa de Movilidad Internacional, y fue asignado en la ciudad de Nyssa, Oregón, donde atendió a más de cien niños de Elementary School (escuela primaria).
Destacó que fue una experiencia retadora, ya que implicó múltiples factores, como adaptarse a un sistema educativo distinto y a un nuevo país, el cual nunca había visitado.
Arévalo Robles consideró que fue una vivencia enriquecedora tanto a nivel profesional como personal, ya que trabajar de cerca con la población migrante hizo reconocer el esfuerzo que realizan los paisanos para brindarle una mejor calidad de vida a su familia.
Dio a conocer que lo más difícil de participar en el intercambio fue seguir los lineamientos, pues para poder aplicar tuvo que dejar a un maestro suplente que lo cubriera durante su estancia en el país norteamericano.
En busca de una nueva aventura
Manuel de Jesús Arévalo señaló que al volver del intercambio se reintegró a su centro de trabajo, en la comunidad San Antonio del Tarasco, Villanueva.
Destacó que continuará profesionalizándose para volver a participar en la convocatoria y así brindarles una educación de calidad a los niños migrantes.
Asimismo, recalcó que tienen que pasar dos años para volverse a postular, tiempo que consideró suficiente para prepararse.
Finalmente, el profesor detalló que le gustaría aplicar para ir a otra localidad, que cuente con mucha población infantil migrante, para ayudarlos con su educación primaria.