En la colonia Valles de Guadalupe existe una cancha de pavimento que guarda grandes momentos, tales como el surgimiento de futuras estrellas del futbol, emocionantes campeonatos y la transformación de una simple plancha a todo un complejo recreativo.
Sin embargo, todo eso quedó en el olvido, pues es amenazada por un espectro que se viste de muchas formas. A veces como un ser humeante, otras se acompaña de estruendo, pero su favorita siempre será cuando vista el traje de oscuridad.
Se dice que este espectro ya ha cobrado vidas y que causó las huidas de los habitantes de esta zona. También le arrebató la ilusión a los que practicaban el deporte más popular del mundo, convirtiendo a estos grandes jugadores en personas de conciencia perdida y sin grandes objetivos.
Actualmente, la gente de la zona empieza a perder el miedo de este ser y se acercan, pero con la latente amenaza que hay cerca.
Aun así, parece estar todavía lejano el momento en el que toda la vida regrese a este lugar, pues el espectro sigue ahí dejar su guarida en la que ya tomó mucha comodidad entre toda la maleza y juegos abandonados.
Mientras tanto, las luces seguirán apagadas y las puertas harán el intento de mantener alejados de todo peligro a quienes busquen, aunque sea encontrar un respiro de aire fresco.