EL SALVADOR. Habitantes de las orillas de la comunidad Tanque Nuevo pidieron que les pongan medidores, para evitar el desperdicio de agua que realizan los vecinos que viven en el centro de la ranchería.
Los afectados, que fueron respaldados incluso por regidores, dijeron que la gente no tiene una cultura del cuidado del agua en esta zona semidesértica.
Tanque Nuevo es, además, la localidad más grande del municipio y, al tirar el agua, la población de las orillas se queda sufriendo por falta del líquido.
“Tenemos un problema muy grande del agua potable; necesitamos un programa que nos eche a andar medidores del agua, para que la gente la cuide y se hagan cargo de su medidor”.
Detallaron que la gente tira el agua ya que del único pozo que abastece la localidad llega con facilidad a las viviendas y muchos ponen mangueras que no cierran, dejan corriendo el agua “y los de la orilla quisieran que hubiera, aunque fuera poca y no llega nada”, lamentaron.
A pesar de que se hizo ya el reporte al ayuntamiento, no hay atención al problema; los afectados dijeron que ante la escasez que sufren, solo la utilizan para los quehaceres diarios en las viviendas: “las mujeres lavan su ropita y riegan una que otra macetita, no se puede tener más… y para el baño, que es muy indispensable”.
La mensualidad que los habitantes de Tanque Nuevo pagan por tener agua en las viviendas es de 70 pesos, el problema, insistieron quienes no la tienen, es que por esa cantidad la mayoría derrocha el líquido.
Al hablar sobre las necesidades que apremian a esta comunidad, los vecinos aprovecharon para dar a conocer que la seguridad en las escuelas no es la óptima, pues todas necesitan que se construyan bardas perimetrales que garanticen la seguridad de los estudiantes.
“Todas las mallas están agujereadas, ojalá nos echaran la mano con una obra de ésas”; las escuelas están en aceptables en su infraestructura, pero las mallas, insistieron, están agujereadas.
De igual manera, tienen un auditorio de uso común que está en malas condiciones y requiere al menos pintura, “acá nos dejan abandonados, en el olvido”, dijeron los vecinos de la localidad.