GUADALUPE. El cumpleaños del pequeño Stephano revivió la esperanza de su familia, quien en su viaje a Estados Unidos en busca de una mejor vida, estuvo en situaciones que la puso al borde de la muerte.
De origen peruano-venezolano, el pequeño celebró su cumpleaños dos después de un agotador viaje de más de tres meses, desde que salieron de Perú.
Braulio Rodríguez Ricciuti, y Abigail Pachas, padres del cumpleañero, relataron a NTR Medios de Comunicación lo difícil de su peregrinar desde Venezuela hasta llegar a Zacatecas, donde indicaron que los bajó el personal del Instituto Nacional de Migración (INM), en Palmira, Ojocaliente.
Destacaron que a su paso por Perú, un grupo de delincuentes los secuestró, y estuvieron varios días en un sitio con más 200 personas privadas ilegalmente de la libertad, incluidos niños como su pequeño Stephano.
En esa pesadilla, Braulio recordó que incluso les tocó ver cómo mataban a las familias , pero gracias a un milagro , expresó sin entrar en detalles, les dieron la oportunidad de seguir vivos.
Dieron a conocer que luego de su experiencia aterradora, decidieron seguir su viaje, y en territorio nacional no habían tenido problemas hasta llegar a Zacatecas, donde junto con un grupo de 250 personas, entre las que había varios niños, fueron desalojados de los vagones del tren.
El personal de migración los bajó a todos aproximadamente a las 17:30 horas, por lo que a pie, guiados por las vías, lograron llegar a Guadalupe.
Fue poco después de las 20 horas que arribaron a un baldío improvisado como albergue, cerca de las vías en Ojo de Agua, para esperar un tren y continuar su viaje.
No obstante y pese a todos los contratiempos, celebraron el cumpleaños de su hijo rodeados de más migrantes y zacatecanos que les llevaron comida, ropa y cobijas para que pasaran la noche abrigados.
Alumbrando su estancia con fogatas, las familias de migrantes se acomodaron para descansar; sin embargo, no dejaron de estar atentos con cada ocasión en la que pitaba el tren para aprovechar la oportunidad de abordarlo, pero no fue posible ya que ninguno tren detuvo su marcha en esa zona.