CIUDAD DE MÉXICO. Estados Unidos acusó a Industrial Minera México (IMSSA), que pertenece a Grupo México, de realizar negociaciones ilegales con un grupo de trabajadores que no cuentan con la representación sindical de la mina San Martín, ubicada en Sombrerete, Zacatecas.
En el primer día de la audiencia sobre el panel del caso de la mina San Martín estuvieron presentes Lorenzo Roel, por parte de México; Kevin P. Kolben, por Estados Unidos; y Gary Cwitco, por Canadá y quien es presidente del panel, además de delegaciones de expertos mexicanos y estadounidenses.
En la audiencia, Estados Unidos defendió sus argumentos en contra de la actuación de la empresa propiedad del empresario Germán Larrea, por desconocer una huelga que estalló en 2007, a cargo de la sección 201 del Sindicato Minero.
Fue en 2018 que la empresa y un grupo de trabajadores reiniciaron actividades productivas sin importar que hubiera un movimiento de huelga.
“¿Sí o no se les negaron sus derechos, ya que las actividades continuaron a pesar de una huelga legal?”, cuestionó una de las representantes del gobierno estadounidense a los panelistas.
HUELGA, ASUNTO DEL T-MEC
En un primer momento, la discusión se centró en determinar si el caso debe verse bajo los términos del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), que entró en vigor en julio de 2020, ya que la huelga tenía alrededor de 13 años de haber estallado.
Para la delegación estadounidense, las violaciones siguen y por ello deben de entrar en este marco.
“IMSSA participa en negociaciones ilegales con los coaligados [es decir, un grupo de trabajadores que irrumpieron la huelga.] Hemos presentado pruebas de acuerdos ilegales.
“La empresa está negociando ilegalmente con un grupo que no está autorizado. IMSSA también viola el derecho de los trabajadores a la libertad de asociación y Contrato Colectivo de Trabajo (CCT) porque ha estado negociando con un grupo que no representa a los empleados, y los acuerdos a los que llegó con ese grupo dañan a los demás”, manifestó la delegación de Estados Unidos.
Por ello, los voceros estadounidenses pidieron que esta negociación ilegal sea considerada como una denegación de derechos.
Según Estados Unidos, se presentaron cambios al CCT a raíz de acuerdos que se tomaron entre la empresa y este grupo de trabajadores coaligados.
“Hay testimonios de los mineros que indican que las negociaciones entre los grupos pueden estarse dando en este momento.
“Estados Unidos ha presentado múltiples ejemplos de estos acuerdos ilegales que señalan o declaran que los cambios a condiciones de trabajo aplicarán directamente a todo el personal sindicalizado en la mina”, comentaron los voceros.
Veronica Gascón Hernández
Agencia Reforma