CDMX. La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) contabilizó 16 hechos de violencia política ocurridos del 2 al 12 de marzo de este año, entre éstos se registraron dos asesinatos y un feminicidio.
En el «Segundo Informe sobre Violencia Política para la Protección y Defensa del Derecho a la Democracia», la comisión a cargo de Rosario Piedra Ibarra detalló que de este total, 25 por ciento o 4 cuatro de éstos se ubicaron en la clasificación de «¡Peligro!», el nivel más alto de los tres incluidos en el «Escalómetro de Violencia Política», herramienta de medición de la CNDH en este proceso electoral.
«Que representan un claro peligro para el libre ejercicio del derecho a la democracia», advirtió.
De los cuatro sucesos marcados en rojo (color del nivel de alerta más alto), dos fueron asesinatos. Uno de ellos, corresponde a Alfredo González Díaz, candidato del PT a la Alcaldía de Atoyac, Guerrero, y el otro, Román Quezada, secretario del PAN en El Fuerte, Sinaloa.
También se reportó el feminicidio de Karla Citlalli Herrera, lideresa municipal del Partido Encuentro Solidario (PES) en Michoacán, quien fue ejecutada en el Estado de México a los 29 años.
En el nivel de alerta máxima, también se mencionó el ataque a balazos en contra de Timoteo Ruiz, regidor del municipio de Acambay, en el Estado de México.
En tanto, en la clasificación de «¡Cuidado!» en color naranja se ubicó a cinco hechos o el 32.25 de los 16 casos de violencia reportados por la CNDH, considerados así por registrarse amenazas por medios físicos y/o digitales contra diversos aspirantes.
Mientras que siete hechos (43.75 por ciento) representaron el nivel de «¡Alerta!» o amarillo, al presentar actos de discriminación, divulgación de infundios, daño y alteración de la imagen o del discurso público.
La Comisión apuntó que conforme avanzan las campañas se han incrementado las acciones que tienden a descalificar el proceso electoral y a ciertas y ciertos candidatos y partidos y/o figuras públicas. No obstante, acotó, también ha aumentado el rechazo a todas esas prácticas y los recursos en contra de éstas.
«Lo que evidentemente reduce su influencia y, además, concita a mayor prontitud en la respuesta de la autoridad electoral, para frenarlas y sancionarlas», señaló.
La CNDH indicó que se redujo el número de hechos en color rojo al pasar de 8 a 4, en comparación con el primer informe, pero lamentó que persistan los asesinatos, feminicidios y atentados contra los aspirantes y funcionarios públicos, por lo que demandó a las autoridades reforzar medidas.
«Plantean la urgencia de reforzar una estrategia de seguridad integral, en la que autoridades federales, estatales y municipales coordinen esfuerzos para garantizar la protección de quienes buscan ejercer su derecho a ser elegidos como parte del presente proceso y de quienes ya asumen un cargo público», exigió.