CIUDAD DE MÉXICO. El Pleno del Senado discute la minuta de la reforma judicial.
Durante una sesión previa se dio primera lectura y se registró la «desaparición» del senador de MC Daniel Barreda y el pleito entre Miguel Ángel Yunes Linares, quien asumió tras la solicitud de licencia de su hijo Miguel Ángel Yunes Márquez, y el senador y dirigente del PAN, Marko Cortés.
Clemente Castañeda, coordinador de bancada de MC, acusó que el senador Barreda fue detenido con su padre, pero el morenista Adán Augusto López desmintió la versión y añadió que se comunicó con el legislador y está libre.
Después se dio un áspero round entre el senador Miguel Ángel Yunes Linares, padre de Miguel Ángel Yunes Márquez, y el dirigente del PAN, el senador Marko Cortés.
Después del fuerte descalabro del 2 de junio, Acción Nacional resentía un duro enfrentamiento entre su dirigente y un viejo militante, a la vista de todos.
Luego de que el pleno concediera licencia a Yunes hijo, por razones de salud, Yunes Linares entró al recinto parlamentario en medio de una gritería.
La bancada de MC lo recibió con el puño en alto y la del PAN lo abroncaba con gritos de «traidor» «traidor», «traidor».
Yunes Márquez bajaba para rendir protesta cuando se le acercó el pastor de la bancada morenista, Adán Augusto López Hernández, para darle indicaciones al oído.
El ex Gobernador veracruzano rendía protesta y el griterío arreciaba: «traidor, traidor, traidor…».
De inmediato, Yunes padre solicitó la palabra y la Mesa Directiva se la concedió.
Yunes reprochó al dirigente que por la mañana hubiese declarado que sería expulsado de las filas panistas cualquier senador que votara en contra de la reforma judicial.
El senador y dirigente pediría la palabra por «alusiones» por segunda ocasión y aseguró que hubo un «pacto de impunidad» a cambio del voto.
«Nos hubieras tomado la llamada para decirnos ‘voy a traicionarlos'», reprochó.