Consumismo, el mercado
¿Hubo transformación de mercado? Hasta el siglo XIX hemos leído que el mercado empezó a manejar las economías, sin ser necesario satisfacer sólo las necesidades como alimentación, vivienda, educación y servicios de salud. Aunque en un porcentaje elevado de la población mundial no estén satisfechos los parámetros de necesidades con calidad o es muy escasa.
Regresemos a Marx cuando cita a Malthus: “El único consumo productivo, en el verdadero sentido de la palabra, es el consumo o destrucción de riqueza por el capitalista con vistas a la reproducción. El obrero es un consumidor productivo para la persona que lo emplea y para el Estado, pero no lo es, en rigor, para sí mismo”. De ahí, que los trabajadores estén con bajos niveles de consumo a pesar de ser agentes productivos.
En el modo de producción establecido por el capitalismo, no olvidaremos que toda actividad productiva obtenga altas utilidades con el fin de persistir con la regularidad de reproducción y de acumulación. Con ello, el capital privado sea nacional o extranjero, obtenga altas ganancias.
Para altos niveles de producción, se requerían fuertes estrategias para lograr acumulación de riquezas, dirigiendo el enfoque, al crecimiento de la población mundial. Por supuesto que a principios de siglo XX, empezó a observarse la desigualdad para adquirir los nuevos productos, a pesar de la gran cantidad de trabajadores que participaban en la elaboración de insumos.
Para la salida de la producción se requería un instrumento que apoyara a la venta de los productos, ante ya la incipiente competencia del mercado, nace entonces el término marketing.
Realmente, con la competencia que creó Ford con su innovadora forma de producción, inicia la necesidad de proyectar la calidad de automóviles de otras empresas (era un marketing naciente).
Dentro del análisis de la historia del mercado y el marketing, en un escrito de Adolfo Posada Gómez, menciona que por primera vez en la Universidad de Michigan, en los Estados Unidos a comienzos de Siglo XX, hay el primer artículo sobre Marketing llamado “Algunos problemas en el mercado de distribución”, que aparece en 1912 bajo la autoría de Arch Wilkinson Shaw.
En el año de 1937 la AMA (American Marketing Association) promueve el marketing como el estudio científico del mercado y su comportamiento y en esta misma época aparece el concepto de diferenciación.
Desde esa etapa, nosotros, los pobladores del planeta estamos sometidos a la influencia del Marketing, según los estrategas del mercado como herramienta científica para enfocar a los gustos del consumidor con la demanda.
¿Qué sucede con los mercados en la sociedad?
En el artículo de Gabriela M. Lara y Georgina Colín, hacen un examen sobre lo señalado por Zygmunt Bauman, que menciona: “Las transformaciones del Estado, basadas en la transferencia de la reconversión laboral a los mercados; es decir, su radical desregularización y privatización y al mismo tiempo (o precisamente como consecuencia de ello) las reglas del mercado que colonizan todas las formas de relaciones personales y vínculos humanos; la construcción de la identidad; el individualismo; la nueva visión de la pobreza y de la criminalidad basadas en el miedo y la incertidumbre; así como la preeminencia de la instantaneidad como precepto que permite el veloz olvido del pasado y la irresponsabilidad por las consecuencias del futuro, esa instantaneidad representada en la gratificación inmediata durante el acto del consumo”.
Con nosotros, el marketing obedecerá a lo que le dicten los mercados y su intricado laberinto de intereses dentro del capital, que según sus estrategas (Gustavo Adolfo Posada Gómez) señalan: “la carrera con mercados más competitivos, mayor industrialización y mejoras en los niveles de educación de la población; la sociedad vislumbraba sus avances y aparece la necesidad de encontrar nuevas herramientas fundamentales para el estudio de los consumidores”.
La sociedad, con muchas desigualdades, estará influenciada por las estrategias de marketing para que consumamos sin importar pobreza o riqueza de los ciudadanos del mundo, como lo veremos.
Hace años propusimos. Los gobernantes son muy inmediatistas o llámelos pragmáticos, se ha asesorado -principalmente en el sexenio de Ricardo Monreal-, a buscar que la industria que se instale en el estado este en zonas donde no existe sobreexplotación de agua, sea superficial o subterránea.
Son importantes las decisiones que se tomarán respecto al uso del agua y la energía que viene, como señaló el secretario del exterior, Marcelo Ebrard con sus homólogos o funcionarios ambientales del país del norte dado a conocer a los medios después de participar en la inauguración del XXVIII Congreso del Comercio Exterior Mexicano que organiza el Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior, Inversión y Tecnología (Comce) indicando: “Con el acuerdo que se hizo con Estados Unidos, México tendría asegurado que va a contar con energía limpia suficiente para la expansión que viene”.
Además: “podrías tener dos restricciones fundamentales a la expansión del reshoring, que son energía y agua”. Sobre el tema del agua, comentó que se tienen que “orientar las localizaciones en donde sí haya agua, hasta donde se pueda”. Vaya, es una información que nos satisface e ir conociendo los resultados del plan geográfico para dicha orientación de empresas.
Para los preocupados por las energías limpias que creen solo son la solar o eólica, con la hidroelectricidad se tendrá un gran avance, sin menospreciar a las anteriores donde se faciliten los medios naturales.
Entonces, los mercados y el marketing harán felices con sus estrategias al capital y nosotros, probablemente, no pagaremos los precios que querían estos buenos samaritanos de las compañías de energías limpias.