AGUASCALIENTES. Con un clima que anuncia un abril caluroso se desarrolló la séptima novillada de la temporada en la Plaza de Toros San Marcos, donde Antonio Magaña se llevó el único apéndice de la tarde, mismo que fue protestado por la mayoría de los asistentes.
En tanto Alejandro Moreno sufrió una cornada que lo mandó al hospital, los ejemplares de la ganadería de El Greco estuvo muy bien presentado y puso a prueba a los jóvenes novilleros que partieron plaza esta tarde del 2 de abril, destacaron los astados corridos en segundo, cuarto y quinto lugar.
Alejandro Moreno abrió plaza ante el novillo Evodio, un complicado ejemplar que lo puso a prueba en todo momento y es prendido en varias ocasiones, poco pudo hacer con los trastos a pesar de su voluntad, despachó al sexto viaje y escuchó palmas del público por su entrega al salir caminando, ayudado por su cuadrilla para ser llevado a la enfermería, en donde le encontraron una cornada en sedal de 10 centímetros con trayectoria hacia arriba en la parte posterior del muslo derecho, siendo trasladado a la Clínica de Guadalupe para hacerle una limpieza y estar en observación, no siendo de gravedad dicho percance.
El segundo de la tarde correspondió a Jorge Esparza, quien ante Maestro tuvo detalles con la mano derecha cuando encontró la distancia del bravo ejemplar, mismo que pedía ser mandado, pero lo poco toreado del coleta quedó en destellos, pinchazo hondo y después trece golpes de descabello sin efectos y el novillo terminó doblando solo, escuchó dos avisos que pudieron ser los tres, pero fue perdonado por la autoridad. Palmas al novillo en el arrastre.
Protesta el público
El tercero de nombre Vodis fue para Antonio Magaña, quien no logró acoplarse a la embestida del astado, que mostraba fiereza y fue desarmado en varias ocasiones, aunque cabe señalar que dio algunos buenos muletazos con la izquierda, dejó una estocada caída y fue premiado con una oreja que fue protestada por la mayoría de los presentes, misma que recibió y dejó en la arena para después dar una desangelada vuelta al ruedo.
Gran Amigo tocó al novillero Enrique Melchor, quien, entregado en todo momento, logró buenos momentos con ambas manos ante el buen ejemplar de El Greco, destacando lo realizado con la diestra, pinchó al primer viaje y luego dejó una estocada trasera que le fue suficiente para dar la vuelta al ruedo. Palmas al novillo en el arrastre.
Una vez terminada la vuelta del novillero se anunció la despedida del monosabio José Antonio Limón, hermano del recién desaparecido Bigotes, quien después de 25 años de trayectoria tomó la decisión de retirarse, siendo homenajeado por sus compañeros del servicio de plaza y los actuantes, dio una emotiva vuelta al ruedo seguido de los novilleros y parte de la cuadrilla.
Gustavo García El Solito recibió de rodillas en los medios a Chirote, dando una larga afarolada por el lado derecho, de pie jugó bien los brazos con la capa, después tomó las banderillas para clavar con más ganas que acierto, pero recibió palmas de los presentes por su voluntad.
Inició el trasteo con la muleta con dos cambiados por la espalda y toreó por ambos lados con entrega y deseos de triunfo, siendo mejor lo hecho con la zurda, dejó una estocada trasera y aunque hubo petición no le fue otorgado el trofeo y dio la vuelta al ruedo con mucha fuerza. Palmas al novillo en el arrastre.
Manuel González cerró plaza con el novillo Por siempre Jorge, con el que inició bien con el capote, también tomó los palos para clavar con más deseos que éxito, ya con la muleta dejó manifiesto su su poco rodaje ante un bravo novillo que lo puso a prueba y aunque logró muletazos aislados se notó la voluntad y deseos de figurar, mató al segundo viaje y escuchó palmas al retirarse.