ZACATECAS. La 41 reunión internacional del Grupo 24 horas de Alcohólicos Anónimos (AA) reunió a más de 5 mil asistentes de siete países, los que llevaron a cabo juntas públicas de información y compartieron experiencias sobre cómo ayudar a otros en su rehabilitación.
Los países que participan en este congreso son España, Ecuador, Colombia, Perú, Portugal y México, que se dieron cita en el Palacio de Convenciones de la capital zacatecana, donde se reunirán hasta el 28 de mayo.
El mensaje de bienvenida lo dio Raúl, del centro Condesa, quien aseguró que “dejar de beber es sencillo, solo se necesita voluntad”, además, en su experiencia, el buen trato que recibió de los compañeros lo hizo sentirse reconfortado, lo que le ha ayudado a permanecer sobrio por muchos años.
El amor de una madre
Lolis, una mujer de Monclova, Coahuila, fue una de las asistentes que compartió su historia. Detalló que acudió a un grupo de ayuda debido al problema de alcoholismo de su hijo.
Explicó que a pesar de tener cinco años en el grupo de Alanon, son 10 años los que lleva conviviendo con la enfermedad de su hijo. Aunque reconoció que ser parte de esta agrupación le ha ayudado a comprender y sobrellevar la situación que hay en casa.
Precisó que antes de llegar a Alanon, discutía mucho con su hijo, lo que provocaba que su forma de beber empeora. Por ello, señaló la importancia de acercarse a un grupo de ayuda, pues no solamente auxilia a los enfermos, sino a ellos como familiares cercanos de los alcohólicos.
Solo era curiosidad
También compartió su experiencia Ángel, un joven de Torreón, quien aceptó que entró al mundo del alcohol a los 12 años, solo por curiosidad, y que luego se convirtió en adicción al depender de una botella.
La enfermedad llegó a tal punto, que Ángel a sus 23 años empezó con tendencias suicidas, las que se fueron cuando un conocido lo llevó a AA, donde le mostraron los 12 pasos para poder salir de la situación en la que estaba y ya lleva cuatro años sobrio.