México.- El director de El Poder del Consumidor, Alejandro Calvillo, llamó a regular la publicidad de los llamados “productos chatarra” dirigida a los menores, ya que ha contribuido a que México esté en los primeros lugares de sobrepeso y obesidad infantil.
En conferencia, indicó que los infantes “son muy vulnerables a la publicidad, no entienden el sentido persuasivo de la misma y son muy vulnerables a las estrategias de engaño y manipulación que asocia el consumo del producto con un regalo, hazaña física o un personaje popular”.
Puso como ejemplo que los cereales para menores “son los peores del mercado”, por lo que anunció una campaña que se difundirá mediante el video “Cártel Chatarra”, producido por el colectivo Puño de Tierra, con la participación de los actores Héctor Bonilla, Bruno Bichir, Mauricio Isaac, Alejandro Calva, Jorge Zárate y Alfonso Bonilla, entre otros.
A manera de parodia, los actores ingresaron a la sala de prensa presentando a “los capos”, quienes son los personajes publicitarios que representan los productos de Kellogs, “Zucaritas” y “Choco Crispis”, Mc Donalds y Coca Cola.
Alejandro Calvillo dio a conocer que la empresa Mc Donalds fue multada en fecha reciente en Brasil por manipular a los niños a través de su publicidad.
Además, explicó que en países como Reino Unido, Suecia, Noruega y Canadá, la publicidad de esa índole se encuentra regulada, camino que quieren emprender en México.
En otros países, refirió, la Organización Mundial de la Salud, la Academia Mexicana de Medicina, los institutos nacionales de Salud Pública y de Nutrición, además de la UNAM y la Academia Mexicana de Pediatría, han hecho recomendaciones y propuestas en ese sentido.
A su vez, Alma Meneses, coordinadora jurídica de la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim), reconoció que la publicidad de ese tipo impacta en forma directa en los derechos de los menores, tanto en zonas rurales como urbanas del país.
Al regularse las políticas públicas relacionas con la nutrición, alimentación y la publicidad de la “comida chatarra”, se descuida el interés superior de los menores reconocidos en la Constitución y la Convención de los Derechos del Niño, advirtió.
“Se está ponderando el interés de particulares sobre los derechos de la infancia”, anotó Meneses.
Reconoció que si bien la publicidad no es un delito, sí es una práctica nociva para los derechos de los menores, además, se carece de un órgano encargado de vigilar “estas malas prácticas” violatorias de los derechos de la infancia y adolescencia.
Destacó la importancia de tener un órgano rector que vigile esas prácticas, que pueden ser nocivas para la salud y los derechos de la infancia, “pero también con un órgano de defensa que pueda perseguir, investigar y sancionar estas políticas públicas”.