Luego de un año de que padres y madres de familia reportaron las pésimas condiciones del preescolar Jorge Federico Haendel, en Chichimequillas, esta semana decidieron tomar las instalaciones ante la falta de respuesta y el peligro que supone para los menores estudiar en estas instalaciones.
Aseguran los padres y madres de familia que son más de 50 menores los que acuden a la institución y están expuestos a los daños estructurales, que cada día son más notorios.
Aunque hace un año reportaron el deterioro de las instalaciones, con el paso de los meses el peligro aumentó, ya que una pequeña fractura en la pared se extendió desde el suelo hasta el techo, lo que alertó el temor por un derrumbe.
“Las condiciones del preescolar ya son muy inseguras para nuestros niños, de hecho ya hay muchas cuarteaduras, caídas de enjarre, bardas con muro agrietado, los baños con tazas quebradas, la banqueta toda cuarteada”, indicaron los jefes de familia.
Asimismo, hay aulas que tienen grietas que atraviesan toda la pared y es notorio desde dentro y fuera, por lo que consideran que es peligroso para los niños estar ahí.
Los padres y madres de familia metieron solicitudes desde el año pasado para atender el lugar, pero hasta el momento no logran que las autoridades se acerquen a la institución.
Ante el abandono y el temor de que esto pueda ocasionar un accidente decidieron tomar las instalaciones desde este miércoles y advirtieron que no se retirarán hasta que haya respuesta y solución por parte de las autoridades educativas, para lo cual exigen que se presenten con un plan de acción y fechas precisas en las realizarán las obras.
“Es urgente que nos hagan caso, ya sea de la Secretaría (de Educación) o de la presidencia, de donde sea, pero que nos traigan apoyos”, concluyeron.