ZACATECAS. Rocío Herrera Torres, jefa del área de Servicios Administrativos del Centro de Capacitación para el Trabajo Industrial (Cecati) 130 plantel Guadalupe, se manifestó este jueves a las afueras de la institución para solicitar su reinstalación después de sufrir presunto acoso laboral por parte del director, Gustavo Hernández Flores.
Detalló que desde hace un año no se reconoció su nombramiento, por lo que no asumió su función, ya que el actual responsable del plantel no permitió que desempeñara su trabajo administrativo en conjunto.
Explicó que al tener una actitud prepotente por parte del directivo, las secretarias que deberían estar bajo su mandato no aceptaron el cargo y, a partir de ese momento, comenzó a recibir amenazas y agresiones verbales.
Herrera Torres, expuso que al ser la responsable de realizar los inventarios no se le ha autorizado ejecutar ninguna de sus funciones, por lo que decidió apoyar en otras áreas que actualmente ya no le dieron oportunidad e incluso se le negó el acceso a la institución.
Puntualizó que ninguna autoridad del centro ni de educación ha tenido acercamiento para buscar alternativas de solución al conflicto y desde hace un año, por situación de violencia intensa, tomó la determinación de permanecer en la puerta del Cecati.
Roció Herrera declaró que anteriormente ya había recurrido al Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje (TFCA), pero no se dio seguimiento al caso ni en la Secretaría de la Función Pública (SFP) y ante la falta de credibilidad en instituciones asistió a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).
Precisó que el caso se turnó a la CNDH porque la presión y la intimidación han sido muy fuertes y es la instancia quien va a determinar un fallo.
Finalmente, afirmó que cuenta con respaldo de la plantilla de docentes, alguna parte de administrativos, pero principalmente los maestros apoyan porque también están en abandono por parte del titular.